martes, 2 de junio de 2009

Teoria de la Relatividad


TEORÍA DE LA RELATIVIDAD POR ALBERT EINSTEI

Desde los tiempos del matemático y físico inglés Isaac Newton, los filósofos de las ciencias naturales (nombre que recibían los físicos y químicos) habían intentado comprender la naturaleza de la materia y la radiación, y su interacción en algunos modelos unificados del mundo. La hipótesis que sostenía que las leyes mecánicas eran fundamentales se denominó visión mecánica del mundo. La hipótesis que mantenía que eran las leyes eléctricas las fundamentales recibió el nombre de visión electromagnética del mundo. Ninguna de las dos concepciones era capaz de explicar con fundamento la interacción de la radiación (por ejemplo, la luz) y la materia al ser observadas desde diferentes sistemas de inercia de referencia, o sea, la interacción producida en la observación simultánea por una persona parada y otra moviéndose a una velocidad constante.
En la primavera de 1905, tras haber reflexionado sobre estos problemas durante diez años, Einstein se dio cuenta de que la solución no estaba en la teoría de la materia sino en la teoría de las medidas. En el fondo de su teoría restringida de la relatividad se encontraba el hallazgo de que toda medición del espacio y del tiempo es subjetiva. Esto le llevó a desarrollar una teoría basada en dos premisas: el principio de la relatividad, según el cual las leyes físicas son las mismas en todos los sistemas de inercia de referencia, y el principio de la invariabilidad de la velocidad de la luz, según el cual la velocidad de la luz en el vacío es constante. De este modo pudo explicar los fenómenos físicos observados en sistemas de inercia de referencia distintos, sin tener que entrar en la naturaleza de la materia o de la radiación y su interacción, pero nadie entendió su razonamiento.
Antes de dejar la oficina de patentes, en 1907, Einstein ya trabajaba en la extensión y generalización de la teoría de la relatividad a todo sistema de coordenadas. Empezó con el enunciado del principio de equivalencia según el cual los campos gravitacionales son equivalentes a las aceleraciones del sistema de referencia. De este modo, una persona que viajara en un elevador o ascensor no podría en principio determinar si la fuerza que actúa sobre ella se debe a la gravitación o a la aceleración constante del ascensor. Esta teoría general completa de la relatividad no fue publicada hasta 1916. De acuerdo con ella, las interacciones entre los cuerpos, que hasta entonces se atribuían a fuerzas gravitacionales, se explican por la influencia de aquéllos sobre la geometría espacio-tiempo (espacio de cuatro dimensiones, una abstracción matemática en la que el espacio se une, como cuarta dimensión, a las tres dimensiones euclidianas).
Basándose en la teoría general de la relatividad, Einstein pudo entender las variaciones hasta entonces inexplicables del movimiento de rotación de los planetas y logró predecir la inclinación de la luz de las estrellas al aproximarse a cuerpos como el Sol. La confirmación de este fenómeno durante un eclipse de Sol en 1919 fue toda una noticia y su fama se extendió por el mundo

Escritores de la epoca Realista


LEOPOLDO ALAS "CLARÍN"


Leopoldo Alas García-Ureña nació el 2 de Abril de 1852 en Zamora. Comenzó sus estudios en León, en el colegio de los Jesuitas.
Su infancia transcurrió entre León y Guadalajara, y a los siete años llegó a Oviedo, ciudad en la que pasó gran parte de su vida.
La revolución de septiembre de 1868 lo incentivó a dedicarse a la política, se interesó por las ideas republicanas que defendería durante toda su vida.
Se recibió de Licenciado en Derecho por la Universidad de Oviedo, y en 1871, se trasladó a Madrid, donde residió hasta 1882.
Comenzó su carrera periodística dándose a conocer como crítico literario y articulista. En abril de 1875 utilizó por primera vez el seudónimo que lo haría famoso, "Clarín", para firmar un artículo en el periódico «El solfeo».
En 1883 regresó a Oviedo para ocupar la cátedra de Derecho Romano.
Su obra más importante es la novela "La Regenta" (1885), aunque publicó otra novela: «Su único hijo» (1891).
En 1885 publicó "Sermón perdido". En pleno realismo, en 1886 escribió su novela corta "Pipa" y entre sus cuentos se pueden citar "Doña Berta", "Superchería" y "Cuervo"(1892), )," El señor y lo demás son cuentos" (1892); "¡Adiós Cordera!", "Dos Sabios" y "Zurita".
En 1895 estrenó su única obra teatral, "Teresa".

Escritores de la epoca Realista


BENITO PEREZ GALDOS



A lo largo de la historia literaria española, uno de los referentes más reconocidos fue Benito Pérez Galdós, un novelista, dramaturgo y cronista que nació el 10 de mayo de 1843.
Su gusto por las narraciones históricas surgió gracias a su padre, un coronel del ejército que, con frecuencia, le contaba historias de la Guerra de la Independencia, donde él había participado.
En 1862, luego de obtener el título de Bachiller en Artes, comenzó a realizar colaboraciones basadas en poesías satíricas, ensayos y algunos cuentos. Tres años después, Pérez Galdós presencia los acontecimientos sucedidos en la llamada “Noche de San Daniel”. Por ese entonces, comenzó a desempeñarse como redactor meritorio en los periódicos “La Nación” y “El Debate”, y en la “Revista del Movimiento Intelectual de Europa”.
En 1870 aparece “La Fontana de Oro”, su primera novela. Tiempo después, comenzaría a publicar la que, con los años, se convertiría en su obra cumbre: “Episodios nacionales”, donde cuenta la vida de los españoles del siglo XIX y su contacto con los diferentes sucesos históricos que marcaron el destino colectivo del país. “Doña Perfecta” fue otra de sus obras que, pese a la oposición que generó ese trabajo entre los neocatólicos, desencadenó que, en 1889, Galdós fuera designado miembro de la Real Academia Española.
Además de sus incursiones literarias, el dramaturgo también participó de la vida política de España como diputado en 1886 y, en 1907, encabezó la lista a la candidatura de la Conjunción Republicano Socialista por Madrid.
En 1912, el novelista fue uno de los más firmes candidatos al Premio Nobel de Literatura, pero una campaña opositora generada por sus enemigos políticos, dejó a Pérez Galdós sin ese reconocimiento. Murió ocho años después, el 4 de enero de 1920.

Escritores de la epoca Romantica


GUSTABO ADOLFO BECQUER


Originario de Sevilla, España, Bécquer nació el 17 de febrero de 1836 siendo su padre un célebre pintor del costumbrismo sevillano quien dejó huérfano a Adolfo a los cinco años; comenzó sus primeros estudios en el colegio de San Antonio Abad, para luego pasar a tomar la carrera náutica en el colegio de San Telmo.A los nueve años quedó huérfano también de madre y salió del anterior colegio para ser acogido por su madrina de bautismo. A la edad de diecisiete años dejó a su madrina y a la buena posición que ésta le proporcionaba para viajar a Madrid en busca de fortuna a través del campo de las letras que se le daba con facilidad. Como es conocido, no era fácil subsistir de la literatura y paradójicamente, Bécquer que deseaba encontrar fortuna lo que abundó fueron escaseces, por lo que se vio obligado a servir de escribiente en la Dirección de Bienes Nacionales, donde su habilidad para el dibujo era admirada por sus compañeros, pero fue motivo de que fuera cesado al ser sorprendido por el Director haciendo dibujos de escenas de Shakespeare. De este modo volvió Gustavo a vivir de sus artículos literarios que eran entonces de poca demanda por lo que alternó esta actividad con la elaboración de pinturas al fresco. Tiempo después encontró una plaza en la redacción de "El Contemporáneo" y fue entonces que escribió la mayoría de sus leyendas y las "Cartas desde mi celda".En 1862 llegó a vivir con Bécquer su hermano Valeriano, célebre en Sevilla por su producción pictórica pero no por eso más afortunado que Gustavo, y juntos vivieron al día uno traduciendo novelas o escribiendo artículos y el otro dibujando y pintando por destajo; mucho les costó a los hermanos salir adelante de su infortunio y con el tiempo lograron juntos una modesta estabilidad que les permitía a uno retratar por obsequio y al otro escribir una oda por entusiasmo. Como legado para la literatura del mundo, Gustavo Adolfo Bécquer dejó sus "Rimas" a través de las cuales deja ver lo melancólico y atormentado de su vida; en el género de las leyendas escribió la célebre "Maese Pérez el Organista", "Los ojos verdes", "Las hojas secas" y "La rosa de pasión" entre varias otras. Escribió esbozos y ensayos como "La mujer de piedra", "La noche de difuntos", "Un Drama" y "El aderezo de esmeraldas" entre una variedad similar a la de sus leyendas. Hizo descripciones de "La basílica de Santa Leocadia", el "Solar de la Casa del Cid" y el "Enterramiento de Garcilaso de la Vega", entre otras. Por último, dentro del costumbrismo o folklor español escribió "Los dos Compadres", "Las jugadoras", la "Semana Santa en Toledo", "El café de Fornos" y otras más. En septiembre de 1870 dejó de existir Valeriano, duro golpe para Gustavo, que pronto enfermó sin ningún síntoma preciso, de pulmonía que se convirtió luego en hepatitis para tornarse en una pericarditis que pronto había terminar su vida el 22 de diciembre de ese mismo año.




Escritores de la epoca Romantica


ROSALIA DE CASTRO


Nació el 24 de febrero de 1837 en Camino Novo, un arrabal de Santiago de Compostela y fue bautizada el 24 de febrero. Figura en el registro del Hospital Real de Santiago de Compostela como hija de padres desconocidos, aunque se sabe que es hija del semirarista Jose Martínez Viojo y de María Teresa de la Cruz de Castro, de familia hidalga. Pasa sus primeros años al cuidado de unas tías paternas y posteriormente se traslada a Padrón para vivir con su madre. Su nodriza le enseñó la lengua gallega y le hizo conocer la poesía popular en esa lengua. Viaja a Madrid en 1856, donde conoce a Manuel Murguía, con el que contrae matrimonio y quien la pone en contacto con Bécquer y su círculo. En 1857 publica su primer libro poético, La Flor, al que le siguen Cantares gallegos de 1863, y Follas Novas de 1880, ambos escritos en gallego. Su obra principal, En las orillas del Sar, se publicó en castellano en 1884. Con Cantares gallegos se situó como precursora, junto a Curros Enríquez y Pondal, del Rexurdimento cultural de Galicia. La crítica subraya su feminismo pionero. Además fue autora de las novelas La hija del mar (1859), de carácter folletinesco; Flavio (1861) y la costumbrista Ruinas (1866). Además publicó las tituladas El caballero de las botas azules, en 1867, y El primer loco, en 1881. Fue madre de seis hijos, y de su matrimonio, se dice que no fue feliz. De salud delicada y temperamento depresivo, falleció el 15 de julio de 1885 en A Matanza (Padrón).

lunes, 25 de mayo de 2009

Escritores de la epoca Romantica

JOSE ESPRONCEDA

Este poeta y revolucionario fue uno de los más grandes románticos españoles, el más popular del siglo XIX. Su vida integra la rebelión moral y la política, y su estilo se caracteriza por las imágenes arrebatadas y la permanente contradicción de dos estados anímicos: la exaltación y el desaliento.
Nació en Almendralejo (Badajoz), en 1808, pero se mudó pronto a Madrid y comenzó con notable aprovechamiento sus estudios, bajo la dirección del famoso don Alberto Lista.
A los quince años, el día en que fue ahorcado el general Riego, fundó una sociedad secreta, Los Numantinos, para vengar su muerte. Las actividades de los jóvenes conspiradores fueron descubiertas y ellos, condenados a cinco años de cárcel, que se redujeron a unas semanas en un convento de Guadalajara, donde Espronceda compuso el poema Pelayo.
Con dieciocho años se exilió voluntariamente a Lisboa , donde conoció a Teresa Mancha, a quien siguió hasta Londres. Tras un viaje a Holanda en 1828, se instaló en París, donde participó en la revolución de 1830, y entró en España con una expedición de revolucionarios, que fracasó. Fue desterrado y durante ese periodo compuso varias poesías y la tragedia Blanca de Borbón. Raptó a Teresa, a quien había vuelto a encontrar casada y con hijos, y marchó con ella a España (1833). Ella le inspiraría uno de sus poemas más hermosos: Canto a Teresa. Vivió la triple embriaguez romántica del amor, la libertad y la patria.




martes, 24 de marzo de 2009


Un lugar frió y a la vez cálido, un horizonte verde que a su alrededor la cubre muchas montañas, donde se respira aire puro, donde no existe el agobio de la ciudad solo el olor a campo y ha prosperidad.